
jueves, 1 de octubre de 2009
¿QUÉ QUIERE EL SEGURO SOCIAL?... ¡SALUD!

¿QUÉ COÑO SON LOS MEDICAMENTOS GENÉRICOS?

Juan José González
- Director General
SEMEFO, POR LA PUERTA DE ATRÁS...

NEGLIGENCIA MÉDICA
México DF a 28 de septiembre del 2009
• Errores y desinterés
• Los números en México
• Demandar a un médico: casi imposible
• En otros países…
Dicen que no hay profesión más noble que la del doctor, ya que, día a día, trata con personas que se debaten entre la vida y la muerte. Es un hecho que los doctores también son seres humanos y, como cualquiera, están sujetos a cometer errores.
Si ustedes, al igual que yo, han tenido la mala suerte de tener que pararse en el área de urgencias de cualquier clínica pública, sabrán que una cosa son los errores que puedan cometer los doctores, y otra es el poco interés que muestran por los pacientes que necesitan su ayuda, y es que no exagero al decir que necesitas llegar con un cuchillo enterrado para que, aunque sea, la enfermera te pase al área de camillas.
La negligencia médica es el acto u omisión que deriva, en casos extremos, en la muerte del paciente.
De acuerdo a datos de la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (CONAMED), en nuestro país, se presentan alrededor de 1,700 casos de negligencia médica anualmente, de los cuales, sólo entre el 25 y 26% pertenecen a instituciones médicas privadas, dejando la gran mayoría de casos a las instituciones públicas.
Cabe destacar que, nada más el 3% de la población mexicana, tiene contratado algún tipo de seguro de gastos médicos mayores, por el que paga una fuerte cantidad al año a una aseguradora privada, lo que convierte a la salud en un lujo.
De los 1,700 casos mencionados, únicamente el 4 o 5% se resuelven a favor del paciente afectado.
Parte del problema es que, para demandar a un doctor, el paciente, en éste caso la víctima, tiene que enfrentarse a la burocracia institucional, y para colmo, necesita testigos de que el doctor no hizo adecuadamente su trabajo, o sea, debe de presentar la declaración de alguna otra persona que haya estado en el quirófano en el momento del error del cirujano.
Dichos testigos son casi imposibles de conseguir debido a que, por lo regular, el cirujano es el doctor de más alto rango dentro de un quirófano, y si comete un error, los enfermeros, anestesistas y demás estarán más que dispuestos a confirmar la versión del doctor y no la del paciente.
Aunque nos suene casi inimaginable, hay países en los que el seguro médico es gratuito para toda la población, sin importar si cotizan al seguro o no. En México, necesitas tener un trabajo, que no sea por honorarios, para que te permita tener derecho a la temida atención médica gratuita.
Montserrat Alquicira
- Reportera
CONCLUSIONES: SALUD
El problema es que no exigimos resultados, dejamos todo al ahí se va, muchos de nosotros ni siquiera nos preocupamos por tener un seguro médico, y no destinamos una porción de nuestros ingresos a algo que asegure nuestro bienestar.
Preferimos vivir en la ignorancia y desentendernos de nuestros asuntos, tomemos de ejemplo la reciente alerta de los casos de contaminación de agua en las delegaciones de Xochimilco, Tláhuac y Milpa Alta, el único reclamo que se hizo escuchar fue el del director del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, Ramón Aguirre, que para que no le vayan a caer con que no hace bien su chamba desmintió la alerta de la Cofepris.
Eso sí, en Iztapalapa no se podrán quejar de que el agua en la delegación también tiene caca porque ni agua tienen.
Estamos concientes que el sistema de Salud en México tendrá sus aciertos, pero se trata de exponer aquellos sitios a los cuales aún les hace falta mejorar. Como vimos en esta edición tenemos de donde salir adelante, porque hay gente preparada , hay lugares donde se comienzan a ver cambios y otros donde quizás nos haga falta averiguar más para saber que diablos sucede.
martes, 29 de septiembre de 2009
SE LE ABRIÓ AL TOCAYO...
(POR FAVOR ENCIENDE TUS BOCINAS, DALE PLAY Y ESCUCHA MIENTRAS LEES)
México, D.F. Septiembre 29, 2009. Nuestro querido tocayo para muchos, el famosísimo Juanito al quien no habíamos dedicado siquiera unas líneas en este blog, dio el brazo a torcer, declarando abiertamente que cederá el paso a Clara Brugada como monarca de Iztapalacra.
Nuestro queridísimo Juanito o, bien llamado en los barrios bajos, Rafael Acosta, quien tuviera como personajes emblemáticos y de ejemplo particular a Hugo Chávez y Fidel Castro, cedió ante la presión, la cartera, la conciencia o la razón comunicándonos a todos su retorno al mundo real para pedir licencia y darle paso a la señora Brugada pa’ que se encargue del changarro.
Después de entrevistarse con el efetivo de Chilangolandia, Marcelo Ebrard, eso sí, a puerta cerrada, Juanito dijo a los medios que pedirá licencia por 56 días, con motivos principalmente de salud – Pues me he sentido muy mal del corazón… no sé si sea por la presión – y no siendo coacción a cualquier figura política, dirigente, partido o peje lagarto. Al mismo tiempo, gente residente de Iztapalapa entonaba el grito: Juanito, Juanito… pórtate hombrecito, como reclamo a la tan popular grilla desatada en torno a este nuevo símbolo nacional en lugar de atender de forma efectiva las exigencias del pueblo tales como la problemática de la falta de agua en tal delegación.
¿Era Juanito el próximo mesías? ¿Era, tal vez, el cambio que México necesitaba? O, viéndolo desde otro punto de vista ¿Era un peligro para México? Supongo que depende del cristal – del partido- con que se mire. ¿Es tan imbécil Juanito? Es que su ser bonachón y pobretón ¿causaba una verdadera identificación con el pueblo? Iztapalapa, al igual que todo México, necesita de dirigentes reales, de gente con huevos que se parta el hocico por su gente y no por arrancarse el hueso peleándose hasta con los de su mismo partido. Clara Brugada, Rafael Acosta, Demetrio Sodi o el mismísimo Batman pueden ser los delegados que le cambien la cara a cualquiera de nuestras delegaciones, ciudades o pueblos, si de manera honesta y leal lo hicieran. El punto crítico es saber si personajes como el tal Juanito, bobos, nobles y analfabetas tienen gran diferencia con los políticos encargados de conducir el país por un sendero mejor.
Si me dieran a escoger entre Juanito, El Peje, Calderón, el clásico diputado dormido a media asamblea, el senador con sus incalculables gastos, el secretario del IFE con su sueldo de miles y miles de pesos y Gustavo Adolfo Infante, a alguien para dirigir mi colonia, mi delegación, mi ciudad o mi país, preferiría quedarme de brazos cruzados escuchando por siempre, como castigo eterno, esta mierda de rola de El Tri… Seguramente Chuck Berry, donde quiera que esté se estará rebolcando de odio mientras vomita al escuchar una nueva versión de Johnny Be Good.
¿Cuándo México? ¿Cuándo?
Juan Mendoza
-Jefe de Información